Disfunción eréctil: ¿la tengo o no la tengo?

10 diciembre, 2016 4 mins de lectura
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Dudamos que sea necesario explicar lo que es la disfunción eréctil, pero por si quedaban dudas, ahí les va su más conocido sinónimo: impotencia; o sea, la incapacidad para lograr una erección y/o mantener la firmeza de ésta. Lo anterior lo sabe prácticamente cualquier hombre, pero lo que no muchos tienen claro es por qué ocurre, a quiénes les puede pasar o cómo se trata este problema.

Otro aspecto que a muchos hombres les causa conflicto es saber a ciencia cierta cuándo realmente tienen un problema de disfunción y cuándo se trata únicamente de factores externos (alcohol, drogas, nervios). Esto es muy importante pues no faltan quienes, por una o dos veces que su desempeño no es el que esperaban, ya se angustian pensando que son impotentes y, peor aún, hasta se automedican “por si las dudas”. Pues bien, es hora de aclarar estas cuestiones.

Causas

Lo primero que hay que saber es que la disfunción eréctil no es un problema exclusivo de adultos mayores; si bien es mucho más frecuente en hombres mayores de 40 años, la realidad es que cualquier hombre, de cualquier edad, es susceptible y puede, en cualquier momento, desarrollar esta afección. Por supuesto, no llega de la nada, hay factores determinantes en este sentido: según el portal de salud Madina y Azparren, 80% de los casos de disfunción tienen causas fisiológicas y 20% son de origen psicológico; estas son las más comunes:

qué es la disfunción erectil

De origen fisiológico

  • Enfermedades varias, entre las principales: hipertensión, diabetes, problemas cardiovasculares, renales o hepáticos.
  • Cirugías o traumatismos en el área genital y/o abdominal.
  • Lesiones medulares.
  • Diversos medicamentos, entre los más comunes: antidepresivos, ansiolíticos, antihistamínicos y hormonales.
  • Malos hábitos de vida: tabaco y alcohol en exceso, obesidad, drogas.

De origen psicológico

  • Depresión y ansiedad.
  • Estrés y presiones.
  • Trastornos psiquiátricos.

¿Tengo o no tengo disfunción eréctil?

cómo curar la disfunción erectil

Sabemos que el hombre es muy sensible respecto a su miembro viril y, aunque ya hemos dicho muchas veces que el pene no lo es todo, muchos hombres siguen instalados en una idea falocéntrica del placer, por lo tanto, si su pene les falla una vez sienten que el mundo se viene abajo y de impotentes no se bajan. ¡No, señores, no! No porque ocasionalmente les cueste trabajo conseguir la firmeza adecuada, quiere decir que tienen un problema sexual.

Un diagnóstico de disfunción eréctil debe hacerlo un especialista (no tú o tus amigos) y se basa en la frecuencia con que se presentan los inconvenientes; es decir, si en uno de cada diez encuentros sexuales presentas dificultades, ¡no eres impotente, eres humano! Ahora que, si en la mayoría de tus encuentros te cuesta trabajo penetrar o continuar la relación porque tu erección no es suficientemente firme o se pierde rápidamente, entonces es momento de ir con el urólogo.

¿Se puede resolver?

¡Por supuesto que sí! Si es tu caso, deja de sufrir y acude al médico de inmediato, pues más del 90% de los casos de disfunción se resuelven positivamente con el tratamiento adecuado; dependiendo del origen del problema, pueden darte medicamentos, cambiar algún fármaco que estés utilizando, proponerte tratamiento hormonal, terapia psicológica y, en los casos más graves, el uso de algún dispositivo de vacío.

Recuerda que en temas de salud sexual, el único que te puede ayudar es tu médico; no te resignes a vivir con una condición que es completamente tratable, quítate la pena y acude al urólogo una vez al año.

¡Cuidarse es ser Kinky!

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