Fantasías sexuales masculinas

3 agosto, 2016 5 mins de lectura
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Ellos tienen la cabeza llena de fantasías sexuales y, al igual que ellas, no siempre se atreven a expresarlas todas. Nos hemos puesto a investigar cuáles son las fantasías sexuales más recurrentes de los hombres y nos encontramos tanto con las clásicas (sí, esas que son casi un cliché) como con algunas que, ya sea por pena o por miedo a ser juzgados, ocultan o no suelen expresar en voz alta.

A algunas mujeres, las fantasías masculinas les resultan extrañas o incluso llegando a lo “pervertido”; pero no te asustes, toma en cuenta dos cosas: primero, que la perversión como desviación de la norma es, desde una perspectiva psicoanalítica, “una parte inherente a la naturaleza humana”. Dicho de otra forma, todos, sin excepción, desarrollamos conductas que se desvían, en algún punto, de la norma.

Segunda: el término “fantasía” (también muy estudiado por el psicoanálisis) sugiere una oposición entre imaginación y realidad, y según Freud en muchos casos esta “producción puramente ilusoria no resistiría una aprehensión de lo real”. Es decir, la fantasía, como el sueño, es un proceso mentalno todo lo generado por nuestra mente necesita ser concretado; muchas fantasías existen sólo como ficciones del pensamiento y quien las crea tiene muy claro que no se atrevería a llevarlas a cabo.

Las clásicas que nunca pasan de moda

  1. Ménage à trois: sí, lo adivinaste, la fantasía del trío es clásica y una de las más provocadoras; aunque lo más común es que los chicos se imaginen con dos mujeres, también existe la versión MMF (hombre, hombre, mujer), o incluso en la que el hombre sólo ve a dos chicas haciéndolo. Es de las pocas que comparten muchos chicos y chicas.
  2. Virgen o madurita: cualquiera de las dos constituye una fantasía común para los hombres; ya sea estar con una chica muy joven y virgen (el extremo de la inexperimentada), o con una mujer madura que les lleve muchos años (el extremo de la experimentada).
  3. Sin compromisos: tener sexo sin ataduras ni compromisos es otra típica tanto de ellos como de ellas, es el popular sexo de una noche; generalmente se lo imaginan con una desconocida, pues esto refuerza la fantasía de “cogemos y no nos volvemos a ver”.

  4. Bendita tecnología: desde que el internet se volvió parte indisociable de nuestra vida y aplicaciones como Whatsapp o Telegram se hicieron populares, muchos chicos (y chicas también) sueñan despiertos con que su pareja les mande fotos o videos cachondos.

Tip Kinky:

mándaselo mientras esté en una reunión de trabajo o un lugar público, duplicarás la excitación, te lo aseguramos.

Las que involucran vestimenta

  1. Uniformes: Una sexy chica uniformada siempre despertará las pasiones más salvajes de un hombre: policía, colegiala, azafata, marinera… Pregúntale a tu chico con qué uniforme le gustaría verte, ve a una sex shop a comprarlo y lee nuestro artículo sobre juegos de rol(Juegos de rol: disfrázate sólo para él) para que te des algunas ideas.
  2. Disfraces: Hay hombres que, por gustos o aficiones individuales, fantasean con su pareja disfrazada de algo muy específico; así que hablen de ello y averigua cuál es su anhelo. Algunos bastante comunes son: la princesa Leia de Star Wars, Gatúbela, Lara Croft, conejita de Playboy o, más recientemente, la Khaleesi de Game of Thrones. Pero en gustos se rompen géneros, así que no olvides la comunicación.

  3. Lencería: recuerda que los hombres son básicamente visuales, por lo que cualquier cosa que deje ver tu cuerpo y lo resalte lo volverá loco. Las tangas y los sostenes con encaje no tienen desperdicio, pero si realmente quieres sorprenderlo cómprate un babydoll, medias y liguero, estas piezas de lencería son las que más los hacen fantasear. Lee esto para que escojas adecuadamente tu ropa, según tu tipo de cuerpo.

Las que implican transgredir algún límite

En esta categoría caben muchísimas fantasías sexuales (estrictamente hablando, todas), puesto que si no hay un límite que trasgredir, entonces entramos en el territorio de lo cotidiano. Estas fantasías implican contravenir los límites de autoridad de cualquier tipo, de ahí la recurrencia de hacerlo en lugares prohibidos o con personas que teóricamente nos están vetadas.

¿Las más comunes en este rubro? Hacerlo en la oficina (ya sea con la jefa o con una empleada), al aire libre, en un ascensor, con una maestra o con una mujer casada. Algunos hombres han confesado que incluso llegan a fantasear con la amiga, tía o prima de su pareja; aunque casi todos declaran que no actuarían al respecto, lo que excita su fantasía es precisamente el factor de lo prohibido.

Recuerda que el órgano sexual más potente que tenemos es la mente, así que no te limites en tus fantasías y trata de cumplirlas todas, siempre y cuando respetes la ley suprema del estilo de vida Kinky: si me produce placer, hay consenso y no causa daño ni a mí ni alguien más, entonces no está mal: ¡hazlo, disfruta y dale sentido a tus sentidos!