El Reno: la posición sexual para una Navidad muy Kinky

9 diciembre, 2019 3 mins de lectura
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Llegó diciembre y todo se pinta de rojo y blanco; la Navidad acapara casi todos los aspectos de esta época, desde los adornos en casa y los adornos en la ciudad, hasta la vestimenta y la lencería; así que ¿por qué no habríamos también de ponerle espíritu navideño al sexo? El día de hoy te recomendaremos la postura del Reno, especial para que disfruten con todo esta época y entren en calor sin necesidad de calefacción.

¿Cómo se hace El Reno?

La posición del Reno es muy parecida a la del perrito, solo que con un pequeño cambio que hace toda la diferencia. La mujer se coloca en cuatro y el hombre se pone detrás de ella para penetrarla; hasta aquí todo es igual al famoso doggystyle, pero lo que sigue cambia: en vez de que la mujer se mantenga apoyada en sus rodillas, dejará caer su peso hacia atrás, sobre los muslos de su pareja.

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¿Por qué es diferente al perrito?

Este detalle de recargarse en las piernas del hombre, aunque aparentemente es irrelevante, cambiará por completo las sensaciones para ambos. La penetración se vuelve un poco menos profunda que en el perrito, pero para las chicas es mucho más satisfactoria, ya que por el ángulo en que entra el pene, éste puede estimular deliciosamente la zona G, facilitándole llegar al orgasmo.

En el caso del hombre, el hecho de que la mujer se recargue sobre él, hará que los músculos pubocoxígeos de ella se contraigan y, por lo tanto, él sienta mayor compresión en su miembro. Además, para ellos es súper excitante sentir y ver el trasero de su pareja sobre sus piernas; se convierte en un triple estímulo: visual, directo sobre el pene e indirecto sobre su pelvis y piernas.

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¿Cómo lo puedes hacer aún más Kinky?

El Reno da para hacer muchas cosas Kinkys; aquí te damos solo algunos consejos, pero ustedes dejen volar su imaginación e intenten cosas nuevas. Por ejemplo, es una postura ideal para practicar un buen spanking; también es perfecta para que él pruebe en ella algunos juguetitos anales, como plugs o bolas tailandesas; además, si a ambos les gusta la idea, pueden probar con una correa para que él jale levemente de tanto en tanto.

Y, claro, si se quieren poner en espíritu navideño al mil, pueden comprarse atuendos especiales: unos cuernitos de reno para ella, un gorrito navideño o incluso un plug anal de esos que imitan colitas de animales. Como siempre te decimos, el límite es tu imaginación, así que déjense llevar, atrévanse a jugar y disfruten de esta época con una posición sexual que asegura mucho placer y diversión. 

¡Hazte Kinky!

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