Tu pene no lo es todo: aquí 6 motivos para que te convenzas

15 septiembre, 2016 5 mins de lectura
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Pareciera que muchos hombres disfrutaran angustiándose por su pene: se preguntan todo el tiempo si tiene el tamaño adecuado, el grosor justo y si es posible alargarlo, batallan intentando que dure erecto una hora seguida y si su erección se llega a perder en algún momento sienten que es el fin del universo y de su vida sexual. Si alguna vez has tenido alguna de las preocupaciones anteriores, este artículo es para ti. ¡Léelo y no te vuelvas a obsesionar con ese tema!

La penetración no es indispensable

cómo hacer eyacular a una mujer

‘¡¿Qué?! ¿Que no necesito penetrar para tener sexo?’ ¡Así como lo lees! Erróneamente, nos han enseñado la sexualidad como un proceso falocéntrico, es decir, que gira en torno al pene y sin éste no es nada. La realidad de una sexualidad integral es muy diferente: piensa en tu pene como una herramienta más de las muchas que puedes utilizar para complacer a tu pareja.

Para que amplíes tu panorama a este respecto, te sugerimos un ejercicio: en una de cada tres relaciones sexuales, proponte no penetrar a tu chica y darle placer (incluso llevarla al clímax) a través de otros recursos, abre tu mente y usa tu imaginación: existen muchísimos juguetes sexuales, tienes manos y lengua… ¡no tengas miedo a probar!

El Foreplay sí es indispensable

cómo complacer sexualmente a una mujer

Como lo mencionamos en nuestro artículo al respecto, una mujer puede llegar al clímax únicamente con juegos previos de calidad y un ambiente propicio. Recuerda no limitar los preliminares a besos y frotamientos desesperados, hay mil maneras de encenderla y llevarla poco a poco a la cima de la montaña rusa. ¿Quieres ideas? Aquí te dejamos una lista de cosas que te pueden servir: hielos, plumas, aceites de masaje, unas esposas, frutas, crema batida, un listón de seda… ahora, despierta tu creatividad y sorpréndela.

El tamaño no importa

es importante el tamaño del pene

Aunque suene a cliché, es una verdad absoluta (y científica). Los falos de 30 centímetros no sólo son rarísimos (seguramente tu pareja sólo los ha visto en el porno), sino que además no es algo que las mujeres deseen particularmente. Toda mujer coincidirá en que es mil veces más importante que su hombre sepa mover la cadera y agarrar buen ritmo a que tenga un miembro monumental.

Recuerda que la zona más sensible de la vagina abarca máximo 5 centímetros hacia adentro, por lo que técnicamente no necesitarías más; de hecho, un miembro demasiado grande puede lastimar muy fácilmente y dificultar el disfrute de ambos.

Sexo Oral

cçomo hacer sexo oral

Muchas mujeres afirman llegar más fácilmente al orgasmo con sexo oral que con penetración. Esto se debe a la estimulación directa del clítoris con la lengua de su pareja, tema que trataremos más ampliamente en el último punto. Así que, en lugar de preocuparte por tu pene, ocúpate entrenando tu lengua y mandíbula (para que no te canses a los dos minutos).

El famoso Squirting

Seguro has oído hablar de esto y seguro te encantaría que tu chica lograra la eyaculación femenina gracias a ti. Pues te tenemos una noticia: tu pene no lo va a conseguir. ¿Por qué? Porque el squirt se logra, primordialmente, gracias a la estimulación manual directa y constante del famoso punto G, por lo que aquí la chamba la tendrán que hacer tus manos.

Orgasmo clitoriano

“Si es usted un hombre heterosexual y su pareja alcanza el orgasmo habitualmente y sin problemas simplemente mediante penetración vaginal, pertenece usted a un grupo enorme o a un grupo minúsculo: el enorme de los engañados o el minúsculo de los que han encontrado a una mujer cuyos orgasmos llegan de ese modo, sin necesidad de ninguna otra estimulación.” 

El 90% de las mujeres no puede llegar al orgasmo exclusivamente gracias a la penetración, puesto que la mayor parte de las terminales nerviosas se encuentran en el clítoris, no en la vagina; es por eso que muchas mujeres prefieren aquellas posiciones en las que, independientemente de la penetración, existe un roce constante del clítoris.

Como ya te habrás dado cuenta, para la mujer el pene en sí importa mucho menos de lo que a ti te preocupa. Así que recuerda la lección: mientras más te obsesiones con tu miembro, menos satisfactorios serán tus encuentros sexuales – tanto para ti como para ella –; y mientras menos te enfoques en él, más posibilidades y nuevas sensaciones tendrás a tu alcance. ¡Explora y Hazte Kinky!

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